Conociendo el método Montessori

El método Montessori es uno de las formas más efectivas para educar a los niños. Esta teoría, desarrollada por la italiana María Montessori ha demostrado que ayuda a los niños a liberar su potencial, obtener un desarrollo integral y trabajar sobre bases científicas en donde la inteligencia, la libertad y el material didáctico especializado sean los protagonistas.

Conociendo la importancia de este método, el cual pone especial interés en el conocimiento y el pensamiento abstracto, decidimos hacer una lista acerca de las cosas que debes conocer sobre el tema.

1.- La educación Montessori cubre todos los períodos educativos desde el nacimiento hasta los 18 años, en donde el niño trabaja con materiales concretos científicamente diseñados para desarrollar habilidades cognitivas básicas. Estos objetos sirven para que el niño identifique al error como parte fundamental del aprendizaje.

2.- El adulto sólo es una guía. El profesor sólo ayuda y estimula al niño en todos sus esfuerzos. Le permite actuar, querer y pensar por sí mismo, ayudándolo a desarrollar confianza y disciplina interior, es decir, no es un adulto que arroja conocimientos esperando que el otro los adquiera lo más pronto posible.

3.- El ambiente es un lugar amplio, ordenado y estético. Todos los elementos están hechos a la medida de los niños. El aula está subdividida en áreas temáticas donde se exponen los materiales y la bibliografía correspondientes y permite una gran libertad de movimiento, donde los niños pueden jugar de forma individual o en equipo.

4.- Así se dividen los grados en las escuelas Montessori: En las aulas se juntan a menores de distintas edades, en diferentes salas más o menos así: niños de 3 años, de 3 a 6 años, de 6 a 9 años y de 9 a 13 años. Las salas integradas favorecen la cooperación espontánea, el deseo de aprender, el respeto mutuo y la incorporación conocimientos.

5.- En vez de grados existen periodos de desarrollo, en Montessori son 4 planos: El primer plano comienza con el nacimiento hasta los 6 años, está caracterizado por la mente absorbente del niño; en el segundo plano, desde los 6 a los 12 años, el niño posee una mente razonadora, para explorar el mundo con su imaginación y pensamiento abstracto; en el tercero, de los 12 a los 18 años, el adolescente tiene una mente humanística deseosa de entender la humanidad y la contribución que él mismo puede hacer a la sociedad, en el último, desde los 18 a los 24 años, el adulto explora el mundo con una mente de especialista apropiándose de su propio lugar en él.

6.- El niño es el responsable de su propio aprendizaje. Cuando el niño, según su desarrollo evolutivo, está listo para una lección, la guía introduce el uso de nuevos materiales y presenta actividades de forma individual o a grupos reducidos. En los años más avanzados, cada niño confecciona al comienzo de la semana una lista de objetivos y luego administra su tiempo durante la semana de forma de cumplirlos.

7.- El niño experimenta la alegría de aprender. Este método proporciona las experiencias a través de las cuales los niños crean sus conocimientos y les prepara para las muchas experiencias que ofrece la vida.

8.- El último propósito de este método es que el menor sea independiente. Se entiende que cada niño nace con una “guía interna” y se busca proporcionar oportunidades para que elija, actúe, piense, y se exprese sin obligación o dominación.

9.- Dar a los niños la libertad de escoger y enfrentarlos a decisiones importantes. Esto les permitirá concentrarse en su actividad elegida sin ser interrumpido o molestado. Incluso la actividad más insignificante puede ser de gran relevancia en su desarrollo interno y es necesario permitirle el tiempo necesario para concentrarse en la actividad hasta que ésta termine.

10.- Esto fue lo que dijo María Motessori sobre el método: «El niño, con su enorme potencial físico e intelectual, es un milagro frente a nosotros. Este hecho debe ser transmitido a todos los padres, educadores y personas interesadas en niños, porque la educación desde el comienzo de la vida podría cambiar verdaderamente el presente y futuro de la sociedad. Tenemos que tener claro, eso sí, que el desarrollo del potencial humano no está determinado por nosotros. Solo podemos servir al desarrollo del niño, pues éste se realiza en un espacio en el que hay leyes que rigen el funcionamiento de cada ser humano y cada desarrollo tiene que estar en armonía con todo el mundo que nos rodea y con todo el universo».

11.- Los niños Montessori son usualmente adaptables. Han aprendido a trabajar solos o en equipo, debido a que desde una corta edad se les ha motivado a tomar decisiones estos niños pueden resolver problemas, escoger alternativas apropiadas y manejar bien su tiempo.

12.- No se asignan lugares. El niño puede trabajar donde se sienta cómodo, donde se mueva libremente y hable de secreto sin molestar a los compañeros, y el trabajo en grupos es voluntario.

13.- A pesar de la libertad que se ofrece los niños se concentran más. En un ambiente Montessori el orden, el silencio y la concentración son la constante.

14.- Los mejores aprenden con todos los sentidos. Los niños absorben más el conocimiento a través de la experimentación tocando, observando, probando, olfateando y explorando que sólo escuchando y siguiendo instrucciones directas.

15.- El método reconoce los periodos “sensibles de los niños”. En estos periodos los niños pueden adquirir una habilidad con mucha facilidad. Se trata de sensibilidades especiales que permiten a los niños ponerse en relación con el mundo externo de un modo excepcionalmente intenso, son pasajeras y se limitan a la adquisición de un determinado carácter.

Fuente: VidayEstilo